SAN JUAN, Puerto Rico — En una funeraria en las afueras de San Juan, puertorriqueños de toda la isla se reunieron para llorar a Keishla Rodríguez, la novia encinta de 27 años de un boxeador profesional cuyo asesinato ha provocado indignación por la violencia contra las mujeres.
Una mujer se dirigió a la multitud en una oración, exigiendo acción del gobernador. Un hombre tocaba la guitarra y cantaba una décima que le compuso a la joven. Otras se presentaron con camisetas con mensajes contra la violencia de género y con obsequios en mano.
"Que ella sea la última", dijo Keila Ortiz, la mama de Rodríguez, quien estaba vestida de blanco.
Rodríguez fue reportada como desaparecida hace una semana después de no presentarse en el salón de mascotas donde trabajaba como peluquera canina. Su cuerpo fue encontrado dos días después flotando en una laguna debajo de un puente muy transitado en la capital de la isla. Félix Verdejo, el atleta olímpico que conocía desde la escuela secundaria, fue acusado luego de su muerte.
Su asesinato—y el de una mujer de 35 años que fue encontrada sin vida y parcialmente quemada después de que buscó protecciones legales que no le fueron otorgadas—ha impulsado una conversación nacional sobre cómo proteger a las mujeres en una isla donde la pobreza, los desastres naturales y la pandemia dejan a muchas cada vez más vulnerables al abuso.
El velorio público de Rodríguez, programado para el jueves y viernes, concluirá con la sepultura del cuerpo de la mujer el sábado. El velorio se ha convertido en un momento de inflexión, con muchos puertorriqueños pidiendo a los gobernantes que aborden más rápidamente la violencia de género. Mientras tanto, el gobierno se ha comprometido a impulsar la implementación de una orden de emergencia emitida en enero. Una mujer es asesinada en Puerto Rico cada siete días, según un estudio de 2019 de dos grupos de derechos humanos.
En el acto funerario, los padres de Rodríguez exigieron el fin de los feminicidios en Puerto Rico y dijeron que esperan que este sea el legado de su hija.
"Que el nombre de Keishla, sea el final de los feminicidios,' dijo José Rodríguez, el esposo de Ortiz. "Y que se recuerde a mi hija por eso. Que se recuerde a mi hija como la ley."
"El abuso a las mujeres tiene que parar. Por favor, esto ya no puede volver a suceder", dijo Ortiz con voz solemne.
En el centro del salón donde ocurrió el velorio, Rodríguez yacía en un ataúd plateado brillante cubierto con flores blancas y hojas de color verde oscuro. Los visitantes colocaban ramos de flores en la base del altar. Algunos arreglos tenían forma de perros y patas caninas, un testimonio del amor de Rodríguez por los animales. Decenas de globos de todos los colores y formas, algunos de los cuales decían "Feliz Día de la Madre", colgaban en el aire cerca.
Muchos de los que fueron a velar a Rodríguez eran familiares de mujeres y niñas asesinadas en Puerto Rico. Solo este año, ha habido 21 feminicidios en Puerto Rico, según el Observatorio para la Equidad de Género, considerada una autoridad líder en el seguimiento de la violencia de género en Puerto Rico. Esa cifra indica que la isla está en camino de ver el mismo número de feminicidios que el año pasado, cuando 60 mujeres fueron asesinadas.
Nitza Ríos, madre de Arellys Mercado, cuyo presunto asesino, Jensen Medina, se encuentra actualmente en juicio en un caso que ha recibido mucha atención mediática, consoló a la madre de Rodríguez con un abrazo. Carlos Negrón, el padre de Karla Michelle Negrón, de 15 años, asesinada por una bala perdida durante las festividades de Año Nuevo en 2012, también vino.
Una pareja que perdió a su hija a causa de la violencia el año pasado condujo desde la ciudad costera de Arecibo, a más de una hora de distancia, para consolar a la familia de Rodríguez.
"Fuimos porque sentimos que teníamos la necesidad de dar apoyo, porque hemos vivido en carne propia lo que se siente", dijo Amarilis Torrado, cuya hija, Alexandra Cardona Torrado, recibió un disparo en la cabeza y fue asesinada en junio de 2020, supuestamente por la expareja de su mejor amiga. Su esposo estaba sosteniendo una foto de su hija, mostrando una sonrisa en la fiesta de cumpleaños de su hijo mientras sostenía al niño en sus brazos.
En el estacionamiento de la funeraria Ehret, la familia y amigos de Rodríguez pasaban el rato. Algunos autos tenían mensajes escritos a mano en sus ventanas. Un vehículo blanco decía "Madlane aparece", en los cristales tintados de negro, una súplica que llamaba a Rodríguez por su segundo nombre para que apareciera, un vestigio de la esperanza que tenía la familia de encontrar a Rodríguez con vida hace solo unos días.
Verdejo se entregó a las autoridades federales el domingo por la noche después de que se presentara un testigo con un testimonio violento de primera mano del asesinato. Se enfrenta a cargos federales y tal vez a la pena capital por secuestro y robo de vehículos con resultado de muerte, así como el asesinato de un bebé por nacer.
Según su familia, Rodríguez había salido con Verdejo durante 11 años y a menudo se unía a él cuando viajaba para entrenar en los Estados Unidos. Los familiares describieron la relación con Verdejo, quien tiene esposa e hija, como complicada y plagada de abusos. La madre de Rodríguez le dijo a Telemundo que el boxeador no quería que su novia tuviera el hijo y que ella se dirigía a verlo con una prueba de embarazo cuando desapareció.
Los defensores y expertos dicen que la violencia contra las mujeres se ha exacerbado desde el devastador huracán María de 2017. Una serie de terremotos y cierres pandémicos también ponen en riesgo a las mujeres. El gobernador Pedro Pierluisi declaró el estado de emergencia contra la violencia de género en enero tras la muerte de Angie González, una enfermera de 29 años y madre de tres hijos cuya pareja confesó haberla matado y arrojar su cuerpo por un acantilado. La junta de supervisión fiscal de Puerto Rico asignó $7 millones para financiar los esfuerzos públicos contra la violencia de género esta semana.
En el otro caso que aviva la ira en Puerto Rico, las autoridades y defensores dicen que el sistema de justicia perdió varias oportunidades para proteger a Andrea Ruiz, quien fue encontrada muerta el jueves pasado en una zona boscosa de la montañosa Cayey. Había ido a un tribunal local a fines de marzo para presentar un cargo de violencia doméstica contra el hombre con el que había salido por ocho meses, pero fue desestimado. Tampoco se le concedió una orden de protección.
En mensajes de audio que luego surgieron, obtenidos por Telemundo, Ruiz expresó frustración y decepción con el sistema de justicia.
"Que sea lo que Dios quiera. Que esto me sirva de lección", le dijo a una amiga, quien se sentía aplastada por la respuesta de los tribunales.
Su familia, que en gran parte ha permanecido fuera del ojo público tras su muerte, ha solicitado al tribunal que divulgue las grabaciones de las vistas públicas en la que Ruiz pidió protección legal. El Tribunal Supremo de la isla dijo que no publicaría el audio para proteger a la fallecida.
"Habiendo fallecido mi hija victima de asesinato, es imposible su revictimización," dijo Olga Costas, madre de Ruiz, según una declaración jurada.
En el velorio de Rodríguez, familiares como Michelle Ortiz y amigos se pusieron atuendos en memoria de la fallecida de la cabeza a los pies: diademas, máscaras y camisas de Keishla, con su nombre y rostro en la boca y el pecho.
Ortiz describió a Rodríguez como un "ser de luz, un ser espectacular".
"Ella nació con luz propia y eso fue lo que le molestó a las personas que le quisieron hacer daño, que su luz era muy grande y querían apagarla", dijo.
Le hizo eco de las esperanzas de los padres de Rodríguez: que su muerte podría ser un punto de inflexión en la lucha contra la violencia de género.
"Queremos decirle a las mujeres que alcen la voz", dijo. "Que no se callen. Y que se haga justicia para Keishla y para todas las mujeres del mundo".
Post Top Ad
sábado, 8 de mayo de 2021
Home
Internacionales
Un ser de luz': Puerto Rico llora a Keishla Rodríguez mientras crece la ira por los feminicidios
Un ser de luz': Puerto Rico llora a Keishla Rodríguez mientras crece la ira por los feminicidios
Tags
# Internacionales

About EL GUARANERO
Las Guáranas es un municipio en la provincia Duarte de la República Dominicana.Este municipio está situado entre la ciudad de Cotuí y San Francisco de Macorís, a unos 12 km de la ciudad de San Francisco de Macorís
Newer Article
Doña Chucha: Un hogar escuela distinto
Older Article
Nuevo ataque sin víctimas contra una base militar iraquí con presencia de EE.UU.
Etiquetas:
Internacionales
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario